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Aunque Adele se consagró como la gran ganadora de la noche, su fallido homenaje a George Michael fue lo que la convirtió en noticia. La cantante se equivocó en la letra y decidió parar la actuación para empezar de nuevo. Después de pedir disculpas, terminó la canción entre lágrimas y el público la aplaudió como si nada hubiera pasado. No es la primera vez que Adele tiene una actuación fallida en los Grammy. El año pasado fue criticada duramente por desafinar sobre el escenario. A pesar de todo, su talento siempre logra opacar cualquier error.

La presentación de Adele, sin embargo, no fue la única frustrada. Metallica tuvo inconvenientes con el sonido y el inicio de su show quedó un poco deslucido. El micrófono de James Hetfield no funcionó correctamente y tuvo que compartir el de Lady Gaga. Cuando terminó la presentación, el vocalista de Metallica mostró su descontento pateando su micrófono, mientras Lady Gaga recibía las ovaciones del público.

Otra perlita que pasará a la historia fue la que protagonizó Twenty One Pilots. Los músicos subieron a recibir su premio, nada más y nada menos, que en calzoncillos. Sí, estás leyendo bien. Tyler Joseph y Josh Dun ganaron en la categoría “Mejor actuación de dúo/grupo de pop” y se sacaron los pantalones para subir al escenario. Cuando estuvieron frente al micrófono, explicaron el motivo: varios años atrás, y cuando todavía eran desconocidos, prometieron que si algún día ganaban un Grammy, irían a recibirlo en ropa interior. ¡Y lo cumplieron!

Mirá los momentos más destacados de la premiación.